

EL ACCIDENTE
Nunca lo he contado bien bien.
O sea, hice una suerte de aclaración de este hecho en mi
fotolog luego de que subí esta misma foto y no puse que fue en el 2004. Igual me da plancha la foto, porque mal que mal no salgo muy bien parecida.
Seamos sinceros... salgo como el loly, pero así no más fue la cosa! :
Yo salí del colegio en el 2003. El 2004 hice preuniversitario y mi vida era más fome que chupar clavos. Todas mis amigas se fueron a Viña o Santiago, conocieron gente nueva y algunas terminaron con pololos o embarazadas (no eso no). El tema es que mi vida era una puta mierda de aburrida.
Me levantaba eso de las 8 de la mañana para ir al preu TODOS los días. Salía a las 1 y me iba a cuidar a unos niños hasta las 7 de la tarde. Llegaba a mi casa y desde las 8 hasta las 10 de la noche hacia clases particulares. Los fin de semanas no hacia nada porque no había nadie en Los Andes con los que yo saliera y era terrible.
Un buen fin de semana me llama una amiga, ex compañera de curso, para que fueramos a un carrete. Un rave electrónico. La desesperación por salir salió a flote y...UPA CHALUPA! que me iban a decir po, obvio que iba.
Ella invitó a unos amigos de Santiago para que vinieran al carrete. 2 chicas y un chico. Simpáticos fíjense...nos tomamos unas piscolas en la casa de mi amiga y de ahí partimos tipo 2 de la mañana al carrete.
Alcanzábamos justo en el auto, asi que cero problema. Yo me habré tomado unas dos piscolas (sucede que me carga el pisco, pero era lo que había) y los demás un poco más creo. El chico manejaba. Sí, iba tomado, pero no mal.
Llegamos al súper carrete que era bien alejado de Los Andes, en una zona rural sin alumbrado. Para rematarla había que subir un cerro en el auto para llegar a la cima y ahí estaba la gente toda sudada, bailando ashí shúper locos al ritmo del punchi punchi. Yo me sentía en la civilización, por fin viendo gente y conversando cosas banales, riéndome y bailando. Feliz, si parecía animalito encerrado de tanta santidad.
Tipo 5 de la mañana nos juntamos para irnos. Mi amiga Tamara me dijo que me quedara con ella a acampar (el asunto era con acampada incluida) pero le dije que no, que tenía que llegar a mi casa porque ni avisé. Me insistió pero no quise... Nos íbamos y el ambiente en el auto iba medio denso. Yo no sé qué problema hubo en la fiesta, pero nadie se hablaba, sólo yo que andaba falto de amigas y hablo hasta por el ombligo. Conversaba toda feliz y nadie me pescaba mucho la verdad. Yo iba en la parte de atrás al medio, apoyada entre los dos asientos delanteros.
La chica que iba a mi lado derecho iba raja durmiendo, mi amiga al otro lado hablando por celu con su mamá y bueno, el chofer mientras de copiloto la otra chica. Se pone de música Tatoo "all the things she said" y seguimos por el camino oscuro con las luces bajas. El chico me pregunta "izquierda o derecha? y yo: "derecha" y el me entiende "derecho"
IJJJJJJJJJJJJJJJJJKKKKKKK PAAAM BUM TRRRRRRSSSHHH PAM! PLAFFFFF!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Silencio.
La música seguía sonando fuerte.
Yo pensé "estoy muerta, qué hago ahora" "nadie habla, estamos todos muertos" "No quiero abrir los ojos" "no siento nada...o me morí o estoy hecha mierda"
Y de repente GRITOS. Ensordecedores gritos de todos. "Estoy viva" Abrí los ojos y estaba a la mierda de donde estaba sentada. Choqué contra el parabrisas por lo que recuerdo en ese momento. Mi cara contra el tablero y luego contra el parabrisas, hecho mierda por supuesto, siempre he sido una cabeza dura.
Nos habíamos caído. Se acababa el camino y no había ningún aviso, sin luz y sin conocer el lugar era imposible saber. Grit{abamos todos y yo que en momentos de shock me relajo como si nada les decía a todos: "ya, tranquilos, todo está bien...por lo menos todos vivos". Y me miran: "Claudia!!! no tienes cara!!" Súper ubicados, claro que casi me hice en los calzones, pero me aguanté, sólo quería un espejo. No me quería tocar.
Y me toqué. No era sangre, o sea sí, pero era una tela que me salía de toda la cara, una tela gelatinosamente cerda de sangre. Mi ropa (de blanco la patúa) llena de sangre. Estaba oscuro y no sabía como estaba mi cara, no la sentía, pero se notaba al tocarme que estaba del porte de un zapallo ultra gigante, hinchadísima.
La chica que iba raja durmiendo a mi lado despertó en estado de shock. No era para menos, y lo peor es que sin dientes. Le volaron al pegarse de lleno contra el asiento de adelante. Hicimos el trabajo de buscarle los dientes y tratar de salir de ahí. Porque aparte el único hombre que estaba, en vez de tranquilizarnos, gritaba que el auto iba a explotar. Para que más.
La chica comenzó a enterrarse sus propios dientes, ya que la raíz se puede juntar con la encía al poco tiempo de separarse( se le salieron de raíz) Así, después le podían pegar sus propios dientes...todos atentos a que no le quedara una paleta de colmillo!. Ya, debo confesar algo, cuando me miró sin sus dientes, llorando por ellos, yo me reí. Sí, soy una vil care raja que no tenía cara y me reí de ella....supongo que me causó gracia verla sin dientes. Soy una vil mala persona.
En fin, el asunto es que estábamos perdidos. No sabíamos donde habíamos llegado y sólo veíamos un par de casas cerca. Unas mediaguas y mil perros que venían a ladrarnos. Yo ya estaba perdiendo mucha sangre y me empecé a marear, asi que me acosté. Aún no sabía como tenía la cara.
El chofer iba en quinto de derecho y no podía tener antecedentes policiales. Si llamaba a la ambulancia iba a llegar carabineros, alcotest y cagaba. Ninguno tenía señal, sólo él. Ninguno podía llamar porque él no prestaba el teléfono.
Yo hasta el día de hoy no me sé de memoria el celular de mi amiga tamara, pero ese día no sé como logré quitar el celu y llamarla, sólo alcancé a decirle: "choqué tamy, estoy a 2 metros" jaja 2 metros! nunca fue, pero ahí no sé como logró llegar donde estábamos y llegó con más gente. La pobre casi se murió cuando me vio en el suelo llena de sangre. Le dije que llamara a mi vieja. Después me arrepentía. Tenía terror, no porque me fuera a retar, sino que me daba pena hacerla pasar por ese susto.
Por fin Tamy llamó:
-aló tía?
-hola... (raja durmiendo a las 6 y media de la mañana)
-tía, sabe, es que la clau tuvo un pequeño accidente, ahora la van a llevar al hopital, pero no se preocupe...no le pasó nada asi como grave,...
-yaaa, que son pesás, dejenme dormir, cabra pesá
Y CORTÓ. Plop!
Claro, a mi vieja siempre la llamábamos de los carretes para molestarla, pero nunca pensé que no iba a creer lo del accidente. Igual me dio un poco de verguenza jaja todos en el lugar del choque miraron así como: "tsss la mamiita"
Por fin llegó la ambulancia. Me limpiaron un poco la cara que no paraba de sangrar y me subieron a la ambulancia. Llegó mil gente de la fiesta a copuchar. Y yo siempre con una sonrisa, bien digna jaja.
Ya en el hospital me trataron como un perro. Llegué a un urgencias y el doctor me inyectó en la nariz para rehacermela. Me dolió TREMENDAMENTE. Y se me salió un: "mierda que duele" y él responde: "¿no te gusta andar carreteando tarde?. Me hizo sufrir el doctor ese...me cosió la nariz y yo tiritaba del dolor, luego le tocó a mi párpado, me volvió a inyectar....doloor!.
La chica de los dientes gritaba en la sala de al lado, mientras le cocían la dentadura. Supuse que llamarían a mi vieja y llegaría en cualquier momento. Yo aún no me veía la cara. Me dejaron con suuero acostada y yo me levanté para ir al baño.
Ahí me esperaba un espejo GIGANTE. Me puse a llorar...nunca pensé que era tanto...iba a quedar así pensaba. No. No era yo.
Volví a la cama y llega mi vieja. Primero veo que pasa delante mío, no me había reconocido...tuve que llamarla como pude, porque como tenía la cara llena de puntos no podía ni hablar. Se dio la vuelta y no lo podía creer. Casi se pone a llorar y le dije que se aguantara o si no me iban a dar ganas a mi y no podía. Por los puntos. Le pedí disculpas por hacerle pasar eso. Ella me decía que no me preocupara.
M dieron de alta y llegué a la casa, en la cual estaban mis hermanas chicas. Una se puso a reir y dijo: "puta que te veís feaaaa" y la más chica sorprendida por mi ropa ensangrentada. Me acosté y dormí un día entero, 24 horas.
Ahí estuve 3 meses más o menos con miedo a los autos, de subirme a uno, y hasta el día de hoy no me siento atrás al medio en los autos. El chico que manejaba responsabilizó al hermano de manejar, por la alcoholemia. Mi amiga con la que iba no me saludó en un supermercado, nunca supe porqué. Mi viejo se le pasó la rabia conmigo cuando me vio la cara. Las cicatrices no se notan tanto. No aprendo a manejar aún.